Cocina Solar
Cocina Solar

¿Alguna vez te has preguntado por qué tú no tuviste la idea de la cocina solar? ¿Por qué no se nos pasó por la cabeza que una caja de cartón de doble pared forrada de papel de aluminio con una lamina de vidrio podría fácilmente alcanzar temperaturas de cocción? Creo que sé el porqué.

Parece que no tenemos un conocimiento de las propiedades de los materiales aislantes i del efecto invernadero. Tal y como podemos ver, en el caso de los aislantes, de algún modo fallamos al aplicar lo que pensamos que mantiene nuestro cuerpo caliente y lo que hace que la comida se mantenga caliente. También propondré como desenvolver un entendimiento intuitivo del efecto invernadero.

La gente que se ha introducido recientemente en el mundillo de las cocinas solares cree imposibles las temperaturas que se le dicen que puede alcanzar una simple caja, sólo hecha por tan solo unas capas de cartón. Obviamente el cartón puede evitar que el calor escape. Una manera de comprender los principios del aislamiento, es imaginar que cogemos la anza de un cubo caliente. Esto, sería horroroso.¿Que hubiera pasado si hubieras cogido el cubo con un papel en la mano? Probablemente, tú te hubieras quemado al instante. Ahora imagina que utilizas un trozo de cartón ondulado. Puedes estar bien seguro de que el calor nunca tendría la suficiente fuerza como para quemarte. Después piensa que hubiera pasado si hubiera sido dos trozos con un espacio entremedio. Enseguida te habrás dado cuenta de el aislamiento que se puede llegar a tener. Otra idea que te puede ayudar sería imaginar en ponerse un vestido hecho de diferentes materiales. Imagina que tienes frío y te dan un vestido de papel de aluminio, probablemente tendrías aún más frío. Cuando la gente pregunta por qué no se podría hacer una cocina solar hecha de ladrillos, puedes preguntarles que sentirían si llevaran un traje hecho de ladrillos pequeñitos. Toda la gente sabe que esto no daría mucha protección contra el frío. Nuestra experiencia en mantenernos calientes hace que utilicemos cosas suaves, ligeras, esponjosas como ahora la tela o el papel. La comida en el horno es como nuestros cuerpos. Lo que nos provoca frío también puede "producir frío" a la comida.

El efecto invernadero no es mucho más difícil de entender. Aunque el cristal ha existido desde siglos, la idea de que pudiera concentrar tal cantidad de calor como para cocinar, no ha tenido mucho éxito. Este efecto hace que el calor proveniente del sol se acumule en cualquier espacio cerrado con una obertura acristalada (p. ejemplo, un coche aparcado). ¿Por qué no nos dimos cuenta antes? Yo creo que fue porque parte del efecto invernadero es invisible para nuestros ojos humanos.

Hay dos tipos de luz diferentes en una cocina solar: La luz normal (visible) y la infrarroja (invisible). Cuando miras el interior de una cocina solar, la luz que se ve no parece estar más concentrada o brillante que la que nos pega a nosotros. Nuestros cuerpos no se están calentando lo suficiente como para quemar (y mucho menos para cocinar) por esta razón, la intuición nos dice que la comida no se estará cocinando.¡Nada más lejos de la realidad!. La luz visible no es lo suficientemente intensa como para cocinar, pero una transformación invisible está ocurriendo.

Cuando la luz visible choca contra objetos oscuros dentro del horno, su energía es absorbida por el objeto y entonces rebota en forma de rayos infrarrojos. Nosotros no podemos ver la luz infrarroja, pero ¿Podemos notarla? ¡Claro! Cuando tú estás a varios metros de un fuego grande una noche de invierno, tú sientes el calor en tu cara. El fuego no te está tocando y el aire que te rodea está aún frío. Lo que sientes en la piel son estos rayos infrarrojos invisibles.

Y ya por último: ¿Qué le pasa a los rayos infrarrojos? ¿Cuando pegan sobre el bote se salen de la cocina y retornan hacia el sol? Los rayos infrarrojos intentan salir de la cocina por el cristal pero no pueden atravesar el vidrio. Entonces son absorbidos por el vidrio el cual retorna una cantidad de esta energía al interior.

Así que el esquema sería más o menos así: La luz solar (que ya sabemos que es una mezcla de visible e invisible) penetra el cristal. Cuando esta luz choca contra los botes negros o la bandeja negra se convierte en luz infrarroja. Esta luz se ve atrapada, rebotando a los botes, calentándolos más, creando más rayos infrarrojos que rebotan y etc. Esto va subiendo la temperatura del horno, alcanzando temperaturas altas.

¿Por qué la cocina no se mantiene caliente infinitamente? Bueno, tal y como las temperaturas suben, una mayor porción del calor se sale a través de las paredes y el cristal. La temperatura sigue subiendo hasta que la cantidad de aire calentado es la misma de la que se sale.

Como puedes ver, no es tan complicado. Tú puedes usar tus ojos para ver la luz visible, tu piel para sentir los rayos infrarrojos, y tu imaginación para ver como se transforma y como se atrapa la luz en el horno. De esta manera tú desenvuelves tu sentimiento intuitivo de como funciona la cocina solar. Y podemos utilizar este sentimiento intuitivo para saber que es lo que mantiene nuestro cuerpo caliente y así saber que es lo que mantiene la comida caliente en el horno.

Tom Sponheim es Webmaster del Solar Cooking Archive.